“Inaplazable medición de agua de uso agrícola” Ing. Cesar Galaviz AARFS

by Juan Campoy

En Sinaloa es indispensable empezar a medir con mayor exactitud el aprovechamiento de agua en el uso agrícola: César Galaviz

Los Mochis Sinaloa. – “Sinaloa ha sido golpeado en los últimos años por severas sequías, aunque este año se vivió una captación favorable, se deben de crear mecanismos de conservación eficientes”, indicó el Ing. César Enrique Galaviz Lugo presidente de la AARFS, quien además hizo un llamado a los organismos hidroagrícolas en el estado a cuidar el agua, porque sin ella, simplemente no hay futuro.

“Venimos de años difíciles y debemos de evitar volver a ellos, si bien es cierto, las lluvias son un tema de la naturaleza; nosotros como administradores del agua, debemos de eficientar, tanto su uso, como su conservación, pues no sabemos cómo vienen los próximos años, debemos de reservar lo más que se pueda y esto lo lograremos con la medición del aprovechamiento del agua”, indicó Galaviz.

Indicó el líder agrícola que, una medida de prevención en el cuidado del agua es la medición con exactitud en la distribución que se realiza en cada uno de los puntos de control, en las 2 derivadoras: Sufragio (San Blas) y Cahuinahua (Charay) en El Fuerte; así como en todos y cada uno de los módulos de riego que integran la red y sus sistemas de compuertas y canales.

“El cuidado del agua nos va a garantizar futuros ciclos agrícolas, debemos de crear un “colchón”, una reserva importante ahora que tenemos agua en las presas, si bien es cierto no estamos aún al 100 por ciento en las 3 presas del norte de Sinaloa, alcanza para sacar el año agrícola sin problemas y si la cuidamos mediante la distribución eficiente, lograremos guardar un poco para el año que viene”, señaló César Galaviz.

En otras entidades de la república, en donde el agua es más escasa, se han creado mecanismos de conservación bastantes favorables, tal es el caso de Sonora, que posee una medición de distribución métrica con un menor rango de desperdicio; pues se mide el flujo del agua mediante instrumentos tecnológicos (caudalímetros) que indican la liberación de presión en los sistemas hidroagrícolas, mientras que en Sinaloa, la distribución se hace con la medición métrica visual de niveles en los sistemas de distribución, lo que genera, indiscutiblemente un incremento significativo en el margen de desperdicio, algo que, de acuerdo al líder agrícola, no debe de pasar más.

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