El ciclo OI 2023-2024 se presenta con muy bajos almacenamientos en las presas en el estado de Sinaloa lo cual pone en tela de duda la autorización de cultivos de media demanda y a los de alta demanda prácticamente los restringe a casi cero, excepto cultivos hortícolas tempranos y papa, que aprovechando volúmenes que quedaron a resguardo del ciclo 2022-2023 se sirvió un cierto volumen, pero granos como el caso de maíz la restricción es mayúscula.
Aunque no se ha determinado la asignación que la CONAGUA otorgará a los módulos en el ciclo 2023-2024 los productores están buscando alternativas que les permitan en medida de lo posible continuar produciendo. Cultivos de frijol, garbanzo y cártamo son opciones de bajo consumo hídrico.
Garbanzo tuvo una superficie de siembra en OI 2022-2023 de poco más de 31 mil hectáreas en riego y 3,200 en temporal.
Aunque su mercado es casi para exportación y depende de factores externos para su cotización, es una alternativa ya que con solo el riego de asiento se puede llegar a cosecha.
En el caso de frijol la superficie fue en OI 2022-2023 de 39,242 hectáreas; mientras que de cártamo hubo 956 has en riego y 1,025 has de temporal. Además se tuvo una superficie de 242 has en primavera verano, principalmente en el Valle del Fuerte.
El cultivo de frijol requiere cuando menos un riego de asiento y dos auxilios, en el mejor de los casos para aspirar a una producción más o menos aceptable de 2 tons/ha.
Considerando variedades de azufrado higuera, porque la variedad Reyna es conocida por requerir como mínimo tres auxilios.
El problema es que tanto el cultivo de frijol como el garbanzo, cuando la superficie crece de manera considerable los mercados tienden a saturarse muy pronto y a derrumbarse los precios. En el Frijol la superficie no debe exceder 70 mil hectáreas en el estado y el garbanzo hasta 40 mil hectáreas. Aunque el ciclo pasado de frijol no se rebasaron las 40 mil hectáreas y aún así el precio no fue el esperado por productores.
De acuerdo a datos del Grupo Consultor de Mercados Agrícolas las importaciones de frijol en el periodo de va de enero a agosto 2023 superaron las 140 mil toneladas, lo que representan un aumento del 234.7 % en comparación con el mismo periodo pero del año anterior.
El panorama de la producción de frijol a nivel nacional es muy baja, reduciéndose en 30% con respecto al ciclo año pasado.
El cártamo es poco popular en Sinaloa, únicamente se siembra en zonas de temporal o como segundo cultivo después de un frijol u hortaliza. Se establece con un riego de asiento o en ocasiones aprovechando la humedad residual en el terreno. En regiones como el sur de Sonora se establece como cultivo principal de OI y pueden obtenerse rendimientos hasta de 3.5 tons/ha.
Considerando que frijol y garbanzo requieren terrenos y climas muy específicos, hay regiones de Sinaloa que automáticamente se auto descartan para su cultivo, terrenos pobres o de no muy buena calidad, no son aptos para frijol. En zonas de mucha brisa y humedad desfavorece al garbanzo. Por ende la opción que queda es Cártamo. Aunque existe desánimo ya que el precio por tonelada ha bajado mucho, de haber cotizado en 700 dólares la temporada pasada, ahora está rondando los 400 dlls, lo que prácticamente lo hace irredituable para productores en tierras de renta.
Aun con estas desventajas el cultivo que mayormente podría inclinarse al productor es a Cártamo, una planta originaria de la India cuyo cultivo actual se extiende por todo el mundo. Actualmente se tienen dos principales industria para comercializar la oleaginosa. Una está en Culiacán, Sinaloa y la otra en Navojoa Sonora.
Estas son industrias aceiteras, que tradicionalmente compran toda la cosecha que se produce en Sonora y Sinaloa.
Tradicionalmente se ocupaba para crear colorante rojo, amarillo y naranja a través de sus flores, pero actualmente es utilizado para la elaboración de aceite vegetal por medio de sus semillas. Esta oleaginosa crece fácilmente en suelos poco fértiles y condiciones de baja humedad, que lo convierte en una especie altamente adaptada a las zonas áridas del país.
Actualmente se conocen dos variedades predilectas por la industria aceitera:
semilla para siembra de categoría certificada de las variedades S-323 de ciclo corto y S-390 de ciclo intermedio. Ambas variedades son: 1) S-323 resistente a la cenicilla y s-390 moderadamente resistente a la cenicilla, 2) mayor contenido de aceite, 3) mayor contenido de ácido oleico y 4) mayor potencial de rendimiento de grano.
Producción en México:
En 2021 se produjeron 52,553.28 toneladas de cártamo.
Estados productores:
Baja California Sur
Jalisco
Michoacán
San Luis Potosí
Sinaloa
Sonora
Tamaulipas
Superficie cosechada 31,095.46 hectáreas.
Propiedades:
Es rico en ácido oleico y vitamina E.
Usos:
Para la obtención de aceite comestible que se usa para cocinar o preparar otros productos como la margarina.
Para la elaboración de jabón, harina de extracción, alimento para pájaros, pinturas y revestimientos de superficies.
La pasta de cártamo se usa como suplemento proteico para el alimento del ganado.